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SHIVA, EL SEÑOR DE LAS GOPIS

En la tradición vaishnava se cuenta sobre cómo el Señor Shiva llegó a participar de los pasatiempos del Señor Krishna. Como es sabido, Vishnu es muy amado por el Señor Shiva, al igual que Shiva siempre está en el corazón de Vishnu. Por esta razón, siempre que Vishnu desciende a la tierra o realiza alguno de Sus pasatiempos, Shiva le acompaña en alguna forma.

No obstante, Shiva estaba muy triste, debido a que nunca había podido participar del juego de Krishna con las Gopis, las pastorcillas de Vrindavan.


Shiva había llegado hasta Vrindavan con la intención de ver la danza trascendental de Krishna con las Gopis, Sus devotas.

Pero en la puerta, la Diosa Vrinda Le detuvo. Vrinda dijo: “Oh, Bholenath, no puedo dejarte pasar, puesto que eres un hombre. En el pasatiempo del Señor Krishna con Sus devotas, sólo Krishna puede mantener una identidad masculina. Sólo se permite la entrada a las mujeres”.


Shiva se sintió muy desdichado por no poder ver la danza de Su amado Krishna. La Diosa se compadeció de Él y le dijo: “Oh, Shiva, en el alto Himalaya se halla el lago Manasarovar. Aquel que se bañe en sus aguas conseguirá cualquier deseo de su corazón. Ve allí y lograrás entrar en el Rasa-Mandala (la danza de Krishna)”.

Shiva fue inmediatamente al Himalaya y se sumergió en el lago. Al salir ¡Se había convertido en una doncella! Con gran alegría volvió a Vrindavan y comenzó a bailar llena de júbilo en la danza amorosa del Rasa Lila, junto a Krishna y las otras Gopis.

Krishna vio a la nueva doncella. Parecía una Gopi, pero tenía tres ojos y una serpiente como collar. Inmediatamente reconoció a Su amado Shiva. Le dijo “necesitas un nombre acorde con Tu actual naturaleza. Serás llamada Gopeshvara Mahadeva”. Gopeshvara significa “Señora de todas las Gopis”.

Sin embargo, la serpiente de Su cuello asustaba a las pastorcillas. Entonces, Krishna unió Sus manos, y dijo a Gopeshvara: “Oh, Gopeshvara, la mejor de todas las Gopis. Necesito que hagas un trabajo para Mí. Sólo Tú puedes hacerlo. Colócate en la puerta de Vrindavana. Tú serás la guardiana de esta danza tan sagrada, y sólo dejarás entrar a las almas que sean dignas de ello”.

Gopeshvara aceptó encantada. Desde entonces, esta advocación de Shiva como Reina de las Gopis cuida que sólo quien ha alcanzado el verdadero amor por los Pies de Krishna pueda entrar a Su reino. Todos los devotos de Krishna, por tanto, deben propiciar a Shiva para alcanzar la Morada Suprema, pues nadie más tiene poder para otrogar tal supremo don.

Shloka:

Vrṇdavana vani-pate jaya soma soma

maule sanaka sanāndana sanātana nāradeya

gopiśvara vrajavilāsi yuganghri-padme

prema prayaccha nirupadhi namo namaste

¡Oh guardían de la entrada de Vrindavan!

¡Oh Soma, todas las glorias a ti!

Tú quien tienes la frente decorada con la luna

y quien eres adorado por los grandes sabios como Sanaka, Sanandana y Narada

¡Oh Gopisvara! yo deseo que tú me regales el Amor Divino por los pies de loto de Radha y Madhava, quienes ejecutan pasatiempos alegres en Vraja Dham.

Ofrezco mis reverencias a ti una y otra vez.

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